El turismo gastronómico se define como una forma de descubrir y experimentar un destino a través de su comida. Esto incluye, además de visitar restaurantes y mercados locales, participar en actividades como festivales gastronómicos y elaboración de recetas de cocina regional.

Esta tendencia ha ido ganando popularidad en los últimos años y los viajeros están cada vez más dispuestos a gastar una parte significativa de su presupuesto en experiencias gastronómicas únicas.

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En este contexto, la generación Z, la de las personas nacidas entre 1995 y 2010, puede ser un actor crucial en la gestión y promoción del turismo debido al enfoque consciente de sus elecciones alimentarias. De ahí surge la pregunta: ¿cómo percibe esta generación el consumo sostenible en el turismo gastronómico?

En este artículo analizamos cómo los hábitos alimentarios y el activismo social de la generación Z influyen en sus decisiones cuando viajan.

Alimentación consciente y sostenible

En un mundo donde la conciencia ambiental es cada vez más importante, la generación Z se comporta de manera diferente a las generaciones previas. Sus hábitos alimentarios reflejan un cambio hacia opciones más éticas, inclusivas y saludables.

Muchas personas de esta generación reconocen que comer de manera sostenible requiere un conocimiento que a veces no tienen a su disposición, así como un mayor presupuesto para acceder a opciones más éticas y responsables.

Según estudios previos, las personas de esta generación esperan que el sistema alimentario les permita participar en la promoción de prácticas sostenibles. Esto se traduce en una inclinación hacia el activismo alimentario –el vegetarianismo o el flexitarianismo (una dieta semivegetariana)–, en el que sus decisiones se ven influenciadas por el impacto que sus propias preferencias tienen sobre el planeta.

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Turismo responsable y sostenible

Cuando viaja, la generación Z busca experiencias que le permitan aprender sobre la cultura y las tradiciones del lugar. De ahí su interés en probar la comida y conectar con las comunidades locales. Sin embargo, el coste y la disponibilidad de opciones sostenibles pueden complicar esta búsqueda.

Además, a menudo les cuesta encontrar el punto de equilibrio entre el disfrute de la experiencia de viaje y su compromiso con la sostenibilidad. Si en casa están más motivados para ello, cuando hacen turismo hay factores que pueden provocar que estas intenciones no se cumplan de igual modo.

En muchos casos, el precio de los alimentos y de las experiencias locales y sostenibles les obliga a escoger entre la autenticidad y el coste, lo que les lleva a elegir alternativas menos responsables.

Otro aspecto relevante en las elecciones alimentarias y de turismo de la generación Z es la influencia de las redes sociales. Esta generación es la primera de consumidores nativos digitales, lo que significa que las plataformas sociales juegan un papel crucial en sus decisiones de consumo y viaje. Por ejemplo, la generación Z tiende a confiar en las promociones de restaurantes y experiencias gastronómicas de los influencers, lo que puede llevarles a tomar decisiones impulsadas por la autenticidad de la experiencia pero que no siempre se basan en la sostenibilidad.

Un turismo gastronómico más consciente y sostenible

Aunque hay cada vez más conciencia de la importancia de las elecciones responsables y sostenibles, la falta de información, la falta de recursos y la influencia de las redes sociales dificultan la implementación de estas intenciones. Esta tendencia es más marcada cuando las personas viajan (una actitud provisional) que en su vida cotidiana (una actitud permanente).

La generación Z tiene el potencial de revolucionar el turismo gastronómico al dar prioridad a la sostenibilidad, tanto a nivel personal como social. La creación de productos y experiencias sostenibles y accesibles es una cuestión clave para atraer a este perfil de consumidores que, con sus decisiones, puede jugar un papel fundamental en la promoción de prácticas que beneficien, desde un punto de vista ambiental, económico y social, a las comunidades que visitan.

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