Las Sociedades Financieras Populares (SOFIPOs) son una alternativa si buscas ahorrar o tener un crédito, pero no cubres los requisitos que solicita la banca tradicional; en estas instituciones financieras hay una gama muy amplia de servicios que van desde cuentas de ahorro hasta préstamos personales, y son diseñados para las necesidades de la población no bancarizada y subbancarizada.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), las SOFIPOs “son instituciones enfocadas en democratizar los servicios financieros; es decir, incluir a las comunidades y sectores de la población que tradicionalmente han tenido un acceso limitado a ellos”.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) es la encargada de autorizar y revisar a estas entidades, cuyo objetivo principal es el de fomentar el ahorro y conceder un crédito a la población que cuenta con las características mencionadas anteriormente.
SOFIPOs contra los Bancos
Aunque ambos ofrecen servicios financieros, tienen las siguientes diferencias:
Estas son las diferencias entre las SOFIPOs y los bancos tradicionales.
¿Cuáles son los servicios que ofrecen?
Conforme a lo que estable la Ley de Ahorro y Crédito Popular, Las Sociedades Financieras Populares (SOFIPOs) pueden realizar las siguientes operaciones:
Recibir depósitos. Recibir préstamos y créditos de instituciones de crédito nacionales o extranjeras. Expedir y operar tarjetas de débito y recargables. Conceder préstamos o créditos a sus clientes. Recibir o emitir órdenes de pago, así como transferencias. Recibir los pagos de servicios por cuenta de terceros. Hacer la compraventa de divisas en ventanilla por cuenta de terceros o propia. Distribuir seguros y fianzas, así como recursos de los programas gubernamentales.
Impacto de las SOFIPOs
El impacto de estas instituciones es positivo en la vida de millones de personas porque les permite acceder a servicios financieros que no tenían a su alcance, así como a estos tres puntos importantes:
Inclusión financiera: Contribuyen a reducir la brecha financiera porque permiten que personas de comunidades marginadas accedan a servicios financieros. Fomento del ahorro: Promueven una cultura del ahorro al ofrecer productos atractivos para ello. Impulsan el emprendimiento: Los créditos que otorgan han permitido a miles de personas iniciar o crecer sus propios negocios.
Actualmente hay 36 Sociedades Financieras Populares (SOFIPOs) en México que cuentan con autorización y desempeñan un papel crucial para promover la inclusión financiera en el país. Para conocerlas, da CLIC AQUÍ.